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El final de la pasada temporada que casi nos llevó a Europa y el inicio de la actual que nos llegó a situar segundos en la clasificación era debido en gran medida a una solidez en defensa propia de los equipos de Caparrós, era una línea infranqueable.

Cendrós, Chico, Ramis y Cáceres, esta era la defensa la temporada pasada alternando con alguna titularidad del portugués Nunes, en la actual no se mantiene ninguno de ellos, dos no fueron renovados, uno se vendió y el otro estaba cedido. ¿Es positivo empezar la temporada con una defensa desde cero? Esta temporada se ha demostrado que no.

Todos estos jugadores han pasado por la defensa y a ninguno salvo quizás a Geromel se le puede considerar titular fijo sea por lesiones o simplemente por falta de acierto: Ximo, Nsue, Bigas, Kevin, Antonio López, Biel Company, Nunes, Geromel, Conceiçao y Fontàs. Esto demuestra la fragilidad bermellona.

El desacierto de la línea defensiva es incuestionable, cuarto equipo más goleado del campeonato liguero y sobretodo en las últimas jornadas donde ha recibido goleadas contundentes como el 0-4 en el campo del Levante.

Errores en la portería hay, pero muchos ya vienen desde la defensa sea un error de marca, de precisión, colocación, balón parado, pero está claro que lo que es la base de los equipos de Caparrós no puede fallar. Un equipo se construye desde atrás, sino de poco servirán los goles.

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