16.11.10
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Vaya por delante que con este escrito no quiero criticar a Laudrup, nada más lejos de la realidad. Con 12 jornadas y un equipo aún haciéndose es muy pronto para hacer valoraciones. Y si hubiera que hacerlas, pienso que su labor está siendo cuando menos aceptable: ha sabido llevar bien la llegada de tanto joven de golpe al primer equipo, mantiene al conjunto en la zona media de la tabla y ha pasado de ronda en la Copa del Rey, en uno de los cruces más complicados de toda la eliminatoria.

Tampoco me gusta demasiado comentar si tiene que jugar éste o aquél; pienso que es muy fácil ponerse a opinar en la barra de un bar, que si éste es mejor o aquél no está para jugar, sin tener ningún conocimiento de cómo están sucediendo las cosas en el día a día. No hay duda de que quien mejor conoce esos aspectos es el propio entrenador.

Ahora bien, como observador y/o aficionado y/o periodista, sí me gustaría pedir una oportunidad para el joven Sergio Tejera. Y con un argumento muy sólido, muy claro, y que pienso que la mayoría de nosotros ve cada día.

Desde el comienzo de la temporada en el Mallorca se ha evidenciado un alarmante problema en la zona de tres cuartos de campo. El equipo llega arriba, crea ocaiones, pero siempre más por empuje y casta de los jugadores que por calidad. Y eso más o menos está funcionado, pero ante defensas muy ordenadas, como pudo comprobarse ante el Deportivo o ante el Levante, puede fallar. Falta mucha clarividencia en la línea de arriba, en la llegada, en el último pase.

Este año no contamos con ningún media punta propiamente dicho, rol que, por otro lado, es tradición en el Mallorca desde que regresara a Primera División. Desde Valerón, el primero, hasta Borja Valero, el último, pasando por Ibagaza o Jurado, siempre hemos tenido a un futbolista capaz de crear una ocasión de donde parecía que no había nada; de dejar al nueve sólo ante el portero con un simple toque.


Y quizá el único jugador en toda la plantilla que pueda desempeñar esa función es Sergio Tejera. El catalán llamó ya la atención por esa faceta en el Espanyol, y por eso lo fichó el Chelsea con tan solo 16 años. Ahí no llegó a cuajar, y por ello recaló en el Mallorca en una operación que, como han destacado otros periodistas de la isla, fue muy beneficiosa para el club. Pero de momento no se le ha otorgado ninguna oportunidad en condiciones para demostrar si puede cumplir, o no.

Repito, Laudrup tendrá sus motivos para no hacerlo, pero no se trata de cambiar un futbolista por otro, ni de si este lateral es mejor que aquél, o si este delantero tiene más gol que aquél otro. Se trata de detectar una carencia en el terreno de juego, en el estilo de juego, y de disponer únicamente de un futbolista que la pueda solventar.

Luego, si juega y no rinde, si no satisface esa necesidad, si no es capaz de desempeñar ese rol, se puede seguir con la vía que llevamos ahora mismo, que tampoco va mal. O se puede buscar un refuerzo en Navidad, cosa harto complicada. Pero por lo menos que no se diga que no se ha intentado. Porque si Tejera tiene la calidad para afrontar ese cometido, no hay duda de que el equipo daría un salto muy importante.

2 comentarios:

  1. Muy bueno, yo también pienso que se le debe aprovechar más porque vamos muy escasos de creatividad

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  2. Si es verdad que, como mucho, llegará a costar 600.000 euros a razón de 100.000 por cada 10 partidos, está claro que hay que darle oportunidades y comprarlo. Las posibilidades de revalorización son enormes!!!

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